Marino Luis, músico bonaverense formado en el Conservatorio de Bellas Artes y curtido como cantante, compositor y arreglista, ha sabido capturar en esta composición la esencia del espíritu caleño. Su trayectoria, marcada por años de dedicación a la salsa y al folclor afrocolombiano, se siente en cada línea de la canción, que combina sabor tradicional con arreglos frescos y una energía profundamente festiva. “Para Cali” no solo suena a la ciudad: la celebra.
Uno de los elementos que más ha cautivado al público es la riqueza vocal del tema. Marino Luis convocó a figuras de la talla de Willy García, Jimmy Saa, Beto Kalé y Harold Saa, entre otros artistas de gran calibre dentro de la salsa nacional. El resultado es una interpretación coral que respira diversidad, fuerza y color, manteniéndose fiel al tumbao caleño que desde hace décadas distingue a la capital del Valle como una referencia mundial de este género.
Pero la canción no solo destaca por su producción sonora. Su letra, cálida y cercana, funciona como un retrato íntimo de la ciudad: de sus barrios, su gente, su alegría y su manera tan característica de vivir la fiesta. Es un canto que exalta el orgullo local, un reconocimiento a la historia musical que ha moldeado a Cali y una invitación directa a salir a la pista, a bailar sin pena, a sentir ese latido común que solo la salsa es capaz de despertar.
La elección de “Para Cali” también marca la consolidación del Concurso de Orquestas como un espacio que impulsa el talento local y protege el legado cultural de la ciudad. Con este triunfo, Marino Luis y su Orquesta no solo obtienen un reconocimiento artístico: se convierten en responsables de acompañar, con su música, los días más intensos de celebración que vive la ciudad año tras año. Y no es poca cosa: la canción oficial de la Feria se transforma, inevitablemente, en un símbolo que acompaña a propios y visitantes, en un eco que se repite en avenidas, casetas, salsódromos y reuniones familiares.
De cara a la Feria de 2025, “Para Cali” se perfila como una pieza que dará identidad a los eventos oficiales, a los conciertos multitudinarios y a las noches interminables de baile que caracterizan a la ciudad por estos días. Será, sin duda, la melodía que marque abrazos, fiestas, reencuentros y recuerdos. Una canción para cantar, para gozar y para dejar que el cuerpo hable a través del ritmo.
Cali, que siempre ha hecho de la música un lenguaje propio, recibe esta obra con los brazos abiertos. “Para Cali” no es solo el tema ganador: es un regalo musical que llega en el momento justo, una reafirmación del orgullo salsero y una invitación a celebrar lo que somos. Porque si algo distingue a esta tierra es que aquí, más que en ninguna otra parte, la vida se baila.